El poeta Gonza Montenegro es el nuevo protagonista de la sección “Arte en el Conurbano”. Conoce cómo comenzó en la escritura poética y qué lo atrapó de ella. Descubrí si tiene o no preferencias en la poesía y literatura en general. En la entrevista también comenta sobre sus referentes poetas, de qué se trata Descolonizadxs, dónde participa y su otra pasión aparte de la poesía. Por último su observación de la escena artística del conurbano.
¿Cómo comenzaste a escribir poesía, qué es lo que te atrapó de ella?
Empecé desde muy chico. De hecho, cuando era más chico era una máquina de escribir. Ahora no tanto, pero todavía tengo esos archivos bien guardados porque, a pesar de no tener mucha idea en ese momento escribía con una pasión media desinteresada. Esas cosas me sirvieron mucho para las cosas que estoy escribiendo ahora.
La escritura consciente, que es la que más disfruto, la empecé a ejercer a partir del 2016. Digo consciente, en tanto mecanismos de escritura poética con los que cuento ahora. Cuestión que había escrito un poema y lo llevé a un taller de Diana Bellessi y ella me dijo cosas muy lindas. Entonces a partir de ahí, como si ella me hubiera bautizado poéticamente, no dejé de hacerlo. Realmente es muy divertido hacerlo incluso cuando el producto final es algo monstruoso o triste, o como quieras llamarlo.
¿Qué tipo de poesía te gusta consumir? ¿Y en literatura en general?
No tengo mucha preferencia por un tipo particular de poesía por suerte. La sonoridad del poema para mí es todo. Y eso, para mí, está por encima del sentido y de la imagen. Cuando un poema me gusta, lo leo en voz alta. Esa cosa de la tradición oral de la poesía me fascina, y busco en los demás poetas eso.
Ahora estoy leyendo la obra completa de Marosa Di Giorgio. Yo, que siempre fui medio lento para descubrir autorxs, siento que en Marosa encontré una pequeña perla que no quiero soltar nunca. Para mí leerla es como un sueño, a veces una pesadilla, a veces difusa y a veces, cuando me deja verla, realmente increíble. Es una poeta increíble.
En literatura en general tampoco tengo una preferencia. Además como estudio el profesorado de Lengua y Literatura, leo mucho y muy diverso. Aparte porque no queda otra jaja.
¿Cuáles son tus poetas referentes?
Diana Bellessi sin duda es una. La primerita de todas podría decir. Por todo lo que significó en mis comienzos. Es como la primera banda de rock que fuiste a ver tocar en vivo jajaja.
Después tengo varios pero ninguno para decir “yo quiero escribir así”, no porque no me parecen increíbles, pero es algo que sólo me pasa con Diana. Por ejemplo, Marosa me enloquece, pero no quisiera ser Marosa al escribir.
Me gustaría escribir como Dubín, a veces como Blatt, a veces como Gelman, a veces como Vallejo.. pero no quisiera ser ninguno. Sí creo que ellos me guían un poco y me acercan al producto estético que a mí me gusta.
Por último, mi editor es otro, y no por chuparle las medias. Javier Roldán, editor de Patronus (donde voy a publicar mi primer poemario) junto a su esposo, compañero de universidad y, aparte de tener un enorme corazón, es un increíble poeta que admiro muchísimo y que siempre cuando tengo la oportunidad, le comento a alguien y recomiendo que lo lean.
Participas en Descolonizadxs, para los que no conocen, ¿De qué se trata?
Es una revista Digital del conurbano que llevamos adelante con un grupo de amigos que conocí en el profesorado de letras y que se dedica a difundir la palabra poética de aquellos poetas que todavía buscan abrirse paso en el vasto mundo de la escritura. Yo participaba como miembro medio externo escribiendo reseñas y publicando de vez en cuando pero en este último tiempo me metí más de lleno y es un laburo hermoso que disfruto hacerlo con ellos. También cuenta con una pequeña editorial donde publicamos antologías y diversos fanzines de gente que escribe realmente muy bien. Y hay unas secciones nuevas de entrevistas a diversas personalidades bastante conocidas del campo artístico e intelectual. A mí realmente me parece un laburo hermoso.
Aparte de la escritura, ¿Qué otras cosas te apasionan?
La música. Aunque no soy músico, es algo que nunca pude dejar de hacer. Me apasiona realmente pero nunca pude dedicarme de lleno. Soy un poco vago. Menos exigente e hinchapelotas que con la poesía. Los mecanismos de la poesía me obsesionan al punto de querer buscar tal perfección que encima no existe. No se la encuentra nunca. Es como perseguir un holograma de una zanahoria por el resto de tu vida. Por esa misma razón, mi obsesión funciona como una especie de coraza para tratar de no publicar cosas chotas. A veces no lo logro jajaja. Con la música soy todo lo contrario, medio que no me importa quedar mal y lo hago sin pensarlo.
La última pregunta está relacionada con el nombre de la columna, ¿Cómo observas la escena artística del conurbano?
Esta
pregunta en pandemia es tristísima. Jajaja no porque me parezca
chota, sino porque yo estuve muy pero muy alejado de mirar la escena
artística en el conurbano durante casi dos años. Me hace pensar
mucho esto. Siento que después de estos dos años tremendos, ahora
que todo parece volver a la normalidad, la escena tiene que
reacomodarse en todo sentido. Tanto desde una parte más estructural
como son los espacios físicos donde la escena se desarrollaba antes,
donde se desarrolló en estos tiempos pandémicos, y ahora de nuevo.
Por otro lado, y desde una pata más introspectiva, el arte en
sí mismo, la producción de arte, de poesía, de música, de todo…
Creo que todo esto que pasó tuvo que haber afectado de una forma a
los artistas. Yo por ejemplo, siempre escribo de cosas que vi, que me
pasaban o le pasaban a mis amigos en el barrio, y en estos tiempos no
escribí nada si estaba todo el día encerrado en mi casa jajaja Es
un ejemplo tonto, pero digo, algo ahí tiene que volver a ajustarse,
sufrir un devenir que no lo tengo muy en claro.
Por otro lado
creo que la escena se las arregló bien para estar presente mediante
los dispositivos tecnológicos. Dispositivos que yo creo que van a
ser muy difíciles de reemplazar. Porque es de uso fácil, porque es
barato y requiere menos organización. Y también porque a veces
somos vagos y no queremos salir. Queremos disfrutar de un recital de
poesía por Instagram.
Por: EB (Planetharia)
Fotos: Jimena Zaracho